Sin exceso

Olga Santa María propone una regla de oro relativa a inculcarles a los niños la capacidad de valorar los bienes materiales.

¿Parece que tu hijo nada entre tantos juguetes que tiene? Entonces, debes moderar esa cantidad para no alimentar una afición insaciable.

La psicóloga infantil Gabriela Matienzo explica que este tema es muy recurrente en estas fechas, sin embargo, muchos papás lo pasan por alto, lo que puede ocasionar conductas negativas, tales como que un niño siempre desee lo que no tiene. 

“El tema es que valoren y logren disfrutar de todas las posibilidades que un juguete puede darles antes de pasar al siguiente, porque hay niños que reciben una cantidad exagerada y esto no les permite valorar o disfrutar de ninguno”, comenta. 

La doctora egresada de la Universidad de las Américas aconseja que se den regalos siguiendo un presupuesto y, también, dar algunos que persigan fines educativos y les permitan fortalecer varias habilidades.

“Platiquen sobre la necesidad de pedir sólo uno o dos regalos argumentando que es lo ideal para que los disfruten en realidad. Acuerden que reciban un regalo ‘sorpresa’, más creativo y diferente”, dice la especialista del portal Crecemos Juntos. 

En ese mismo sentido, la psicóloga Olga Santa María propone una regla de oro relativa a inculcarles a los niños la capacidad de valorar los bienes materiales.

“Es importante no ser víctimas de la propaganda comercial y de los descuentos que impulsan las compras innecesarias, hacer una lista ayuda para dejar fuera algo que no es lo que pensamos para los hijos”, cometa la fundadora del centro de atención Psico Avance. 

Este acuerdo entre padre e hijo no tiene por qué ser un problema si se educa a los niños siguiendo valores como conciencia social y cooperación, dice Matienzo. 

“Hay que ayudarles a entender que muchas de las cosas buenas que nos suceden son el resultado de nuestro esfuerzo. En este sentido vale la pena designarles ciertas tareas o cambios en actitudes negativas para una vez logrado el objetivo puedan conseguir ‘eso’ que desean”.

Santa María también enfatiza en el valor de que los niños cuiden y protejan sus juguetes.

“Un niño autodisciplinado que guarda las cosas después de usarlas sabe que le dan identidad, cuando algún juguete se rompe lo ideal no es tirarlo sino repararlo”. 

A JUGAR

Para la doctora Matienzo, lo importante es pasar tiempo de calidad con los niños, ya sea con una lectura compartida, coloreando o jugando, pues es lo que ellos anhelan.

“Hay cosas muy divertidas que un niño puede recibir de regalo, por ejemplo, vales para... prepararles su cena favorita, ver una película en la cama con sus papás, ir a un paseo o disfrutar de un juego de mesa familiar”, enfatiza. 

¡DISTINGUE!

No es lo mismo que un niño pida un regalo por un gusto real que por capricho. En el primer caso, el objeto del deseo tiene relación con los intereses y preferencias del pequeño; en el segundo, se observa un deseo repentino y momentáneo.