Un antojito en cada esquina

La comida callejera en México es tan sabrosa como variada.

La comida callejera en México es tan sabrosa como variada. Siempre en puestos improvisados y coloridos, ofrece gastronómicamente una diversidad de platillos. Las garnachas, como popularmente se le nombra, define a éstos antojitos mexicanos, que en su mayoría, están hechas a base de maíz, pero sus ingredientes son muy variados. Desde los tacos de guisado (tinga, mole, y rajas con crema), pasando por los sopecitos, gorditas, quesadillas, tamales, flautas de pollo y res, o los tacos tradicionales de suadero, nana, oreja, buche, cueritos, maciza, costilla y tacos al pastor.

La venta de comida callejera se remonta a los tiempos prehispánicos, cuando los macehuales ejercían esta actividad para obtener otros bienes. Ellos representaban la clase social que estaba por encima de los esclavos, pero por debajo de la nobleza, es decir, la clase media; pagaban impuestos, rendían servicio militar y trabajaban en obras colectivas.

En la época posterior a la Independencia, el comercio callejero era frecuente entre la clase media y baja; y durante el Siglo XIX era una o la única fuente de subsistencia de muchas familias rurales que habían sido expulsadas de sus tierras. Sin embargo, la apariencia y preparación de estos alimentos se ha ido transformando con el paso del tiempo, producto de las tradiciones mesoamericanas y europeas.

Actualmente, la venta de la comida callejera se localiza en todo ancho y largo del país, y Reynosa no es la excepción.

Los antojitos mexicanos o “garnachas” que gozan de mayor popularidad tenemos:

Tacos al pastor es posiblemente la variedad de taco más popular en el país. Consiste en un delgada y  pequeña tortilla ligeramente frita; la carne puede ser una combinación de puerco y  ternera, preparada con un marinado de achiote, especias y chiles rojos molidos que otorgan un color rojizo. Los filetes son apilados en una estaca de hierro giratoria semejante a un trompo frente a un fuego vertical el cual  se asa. Se acompaña con un trocito de piña, cilantro, cebolla, limón y la salsa que mejor pique.

La popularidad de este platillo es tal que resulta del agrado de personas de todas las clases sociales, por lo que es fácil encontrarlos en lugares que van desde restaurantes gourmet a puestos en la vía pública.

Gorditas  son un platillo mexicano elaborado a base de masa de maíz  rellenas de chicharrón o frijol y otros ingredientes diversos. Las gorditas son en realidad tortillas hechas a mano, en las cuales antes del cocimiento, el disco de masa cruda ha sido rellenado con otro ingrediente (generalmente, chicharrón prensado o queso fresco); posteriormente son fritas en manteca en una sartén especial llamada comal, o en ocasiones solo cocidas sin usar aceite. Se acompaña con cilantro, cebolla picada, queso fresco y salsa a su elección. El maridaje para una gordita es con refresco de cola o aguas frescas como horchata y jamaica.

Sopes son un platillo tradicional mexicano, consistente en una tortilla gruesa de maíz, originalmente frita con manteca o aceite vegetal.

La razón por la que se acostumbra formar un reborde a la tortilla ya cocida, moldeando con las yemas de los dedos toda la circunferencia (de ahí el otro nombre del sope: pellizcada), sirve para que el sope conserve en su interior los líquidos (por ejemplo, las salsas) que se le agreguen. Los ingredientes que comúnmente se le agregan a esta tortilla frita son: primero una cama de frijoles refritos, una cama de lechuga y cebolla picada, crema ácida, queso fresco, salsa roja o verde (o combinado) y una cama de pollo deshebrado.

Tlacoyos  así como el tamal, son de los antojitos posiblemente mas antiguos que se tiene registrado en tiempos prehispánicos; y se preparaba exactamente de la misma forma omitiendo obviamente los derivados de productos lácteos de la vaca. Consiste en una tortilla gruesa ovalada y larga, preparada con una mezcla de masa de maíz y frijoles o habas cocidos, secos y molidos, la cual puede ir rellena de diversos ingredientes (frijoles, habas, carne, requesón, etc.) y sobre la cual se pone una mezcla de ingredientes como nopales, queso, chile y cebolla. Su presentación más común es con maíz azul.

¡ARRIBA EL NORTE!

En Reynosa, como en todo el norte de México, el cabrito es el platillo más popular, pero también se pueden encontrar mariscos por su cercanía al golfo de México, y comida tex-mex por la influencia norteamericana.

La gastronomía de Reynosa se basa en el uso de maíz, carne de cabrito y carne deshidratada. El cabrito asado es sin duda el platillo más popular, lo mismo que el cabrito al pastor, sazonado con una exquisita salsa a base de jugo de limón, cebollas, chiles, ajo y azúcar. La fritada de cabrito, cuya carne se hierve en su sangre con una mezcla de vegetales y especias, también es un platillo que encontrarás en el destino.

Reynosa es reconocida por sus deliciosas gorditas, normalmente son hechas a mano al momento de pedirlas y rellenas con diversos guisados. Las tortillas de harina son muy importantes para cualquier comida en Reynosa, y éstas no puedan faltar en la mesa como una importante tradición mexicana, acompañadas con carne deshidratada, también llamada machacada o machaca, que además sirve como relleno de tacos, gorditas, tamales de chile rojo o los famosos burritos. Los pescados y mariscos son de alto consumo en este destino, en especial los camarones y el pulpo.