Agudizan la crisis las listas escolares

Enormes listas escolares han empezado a llegar a los padres de familia, por lo que ahora tendrán que empezar a prepararse y ver la forma de sacar el dinero ante una difícil economía derivada de la inflación y la pandemia

A finales de agosto los estudiantes regresarán a clases de nuevo, por lo que las familias tendrán que adquirir la lista de útiles escolares que ahora incluye hasta productos de higiene ante la pandemia.

María Guadalupe Ornelas, madre de familia señala que será un gran gasto familias el regreso a clases de sus dos hijos.

Explicó que por las dos listas, gastaría alrededor de mil 500 a dos mil pesos, más todo lo que implica la inscripción.

Por ejemplo para sexto de primaria se está pidiendo desde: cuatro cuadernos tamaño profesional, 1 cuaderno forma italiana, 1 cuaderno profesional de cuadros, 1 juego de geometría, cinta adhesiva,  1 diccionario, 4 plumones, 3 bolígrafos,  calculadora, 2 libros de lectura.

Además se pide  lápices, 2 pegamentos, marca textos, goma, sacapuntas, tijeras, corrector, así como material de higiene como: un paquete grande de toallas húmedas antibacteriales, 1 bote de un litro con agua y dos cubrebocas desechables.

Todo eso sin contar la inscripción, libros, zapatos, uniformes, calcetas, entre otros que son vitales para el regreso a clases.

Para los de segundo grado de secundaria va desde solicitar: 11 cuadernos profesionales, lapicera, lápices,  bolígrafos, borrador,  juego de geometría,  sacapuntas,  diccionario,  corrector, tijeras, pinturas acrílicas, pinceles,  un paquete de hojas de máquina de 500 hojas,  1 paquete de hojas de colores, 20 opalinas, 1 cinta adhesiva, opciones para pintarrón.

Además para seguridad e higiene del estudiante:  1 gel antibacterial de un litro, 1 paquete de papel higiénico,  un laysol desinfectante en aerosol,  un jabón líquido y un paquete de toallas sanitarias en caso de ser mujer.

Los padres gastan más de mil pesos en comprar toda la lista de útiles escolares, además de pagar la inscripción, otro golpe a la economía de las familias, de por si ya desgastada con el alza en los precios de la canasta básica.