Un payaso se convierte en superhéroe

El payaso y su hermano sacaron a uno por uno de la camioneta incendiada.

‘‘Lapicito’’ no es un payaso cualquiera. A la usanza tradicional con la nariz roja, maquillaje blanco sobre la boca y los ojos y pecas sobre pintura rosa, Bernabé Infante Saldaña se convirtió en un auténtico héroe de carne y hueso a costa de su vida.

Junto con su hermano Carlos Enrique, ‘‘Lapicito’’ evitó una tragedia: salvó a una familia de nueve miembros -siete de ellos menores de edad- de morir atrapados en una camioneta envuelta en llamas luego de que un cortocircuito desató el fuego sellando e inutilizando los mecanismos de las puertas y los seguros del vehículo.

No había escape seguro. Las puertas no abrían, los seguros no se desactivaban... y el humo y fuego empezaban a provocar estragos entre dos madres y sus hijos.

‘‘Primero vi que salía humo del motor y luego las llamas. Entonces escuché los gritos de los niños que pedían auxilio con señas’’, declara ‘‘Lapicito’’ a EL MAÑANA y LA TARDE, un día después de la odisea donde arriesgó su vida.

AL AUXILIO

El pasado martes a las 14:00 horas, “Lapicito” y su hermano se encontraban, como de costumbre, en el crucero de la calle Tiburcio Garza Zamora y J. B. Chapa, en la colonia El Maestro, limpiando vidrios para pedir un peso y llevar sustento a su casa.

De pronto, comentaron los hermanos, vieron que de una camioneta Windstar que iba en marcha le salía humo de la parte de abajo del motor y cuando frenó porque el semáforo estaba en rojo, apareció el fuego que en cuestión de minutos empezó a envolver la unidad.

En el interior de la camioneta estaba una familia, dos mujeres y siete niños, quienes desesperados gritaban y a señas les decían que los ayudaran a salir. El payasito y su hermano reaccionaron de inmediato y corrieron para ayudarlos, pero al intentar abrir la puerta, esta no respondía, pues las puertas estaban selladas por el fuego.

- Las puertas no se podían abrir porque los cables ya estaban quemados y se sellaron los seguros- dijeron los hermanos. Al no poder abrir la puerta el payaso le dio un puñetazo a la ventana para quebrarla y afortunadamente lo logró.

Primero sacó a la madre de familia y después uno a uno los menores y a su hermana, los cuales pusieron a salvo retirados de la unidad que ya estaba envuelta en llamas.

- Bajando a los niños y prendiendo la camioneta. En cinco minutos se incendió todo- recuerdan “Lapicito” y Carlos.  Sin embargo, faltaba la menor de sus hijas, quien estaba debajo de los asientos traseros asustada por lo que estaba pasando.

Arriesgando su propia vida, Bernabé regresó a la unidad y sacó a la niña por la ventana trasera, que acaba de reventar por el calor del fuego.

- Era una niña chiquita, esta asustada escondida abajo, entre los asientos y no la hallábamos- señaló.

Los hermanos indicaron que solamente un automovilista se bajó para auxiliarlo cuando sacó a la ultima menor de la camioneta.

Las mujeres, residentes de la colonia Almaguer, comentaron a las autoridades que se dirigían a la ciudad de Camargo Tamaulipas, a la casa de sus padres, para pasar unas vacaciones.

Tras el siniestro la familia perdió todas sus pertenencias, entre ellas todas sus ropas que llevaba en mochilas, pues uno de los menores comentó llorando que el fuego devoró toda su ropa, que solo le quedó lo que traía puesto.

Minutos después llegaron los Bomberos para sofocar el fuego, pero no pudieron salvar la unidad, pues quedó convertida en chatarra.

DESPUÉS DE UN DÍA…

Al payaso “Lapicito” y a su hermano limpia vidrios, ahora los tratan como héroes, pues los automovilistas que pasan por el crucero los saludan con ese mote y ademas los felicitan por lo que hicieron.

Inclusive, ciudadanos les llevan de comer como agradecimiento por lo que hicieron.

‘‘Lapicito’’ también se dedica a vender globos en la calle peatonal Hidalgo, en la Zona Centro, donde también la gente le ha reconocido lo que hizo. Fue una odisea digna de admiración.