Actuar es oxígeno
Sus primeros pasos en la actuación fueron en el teatro, aunque desde niña Tina Romero se inventaba sus propias historias
"De niña yo escribía mis obras de teatro, a los niños les daba dulces para que actuaran en mis obras. Mi hermana siempre estuvo en todas. A veces, cuando esos niños no quería participar, yo tenía que hacer varios personajes, de la reina o la mamá", recordó.
Ciudad de México
Así transcurrió la etapa infantil de la actriz y también su adolescencia. Tiempo después daría el salto al cine, cuyo debut fue en la película Alucarda, La Hija de las Tinieblas, de 1977.
Tiene 74 años y aún conserva un espíritu de asombro para descubrir nuevas historias y desenvolver personajes interesantes.
Por eso esta noche, en el Teatro del Centro de las Artes, el Festival Internacional de Cine de Monterrey le rendirá un homenaje a Tina Romero por su trayectoria como Ícono del Cine Mexicano.
Durante la ceremonia, Romero recibirá el Cabrito de Cristal y se tiene programado exhibir dos de sus películas en las que brilló como protagonista Alucarda, La Hija de las Tinieblas y Bandera Rota (1979) "Como es un arte actuar, ¿cómo vas a dejar de hacerlo? No te puedes retirar del arte. Yo sigo trabajando y con muchas ganas", reflexiona en entrevista la actriz, quien a lo largo de su quehacer actoral ha navegado por las aguas del cine, teatro y televisión.
Su pasión por el arte nació en su niñez, pero no sólo por la actuación, hubo un momento en el que Romero también deseó ser bailarina.
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