Desechan violencias ´menores´ en denuncia
Perniciosa costumbre de sólo considerar delito o agravio en contra de las mujeres, la violencia física, y sólo cuando esta es grave o considerable
Las autoridades ministeriales, así como de instancias protectoras de la mujer, continúan con la perniciosa costumbre de sólo considerar delito o agravio en contra de las mujeres, la violencia física, y sólo cuando esta es grave o considerable, lo que abona a la espiral de agresiones de género.
Esto se desprende la conferencia que diera la especialista Josefina Guzmán Acuña, quien la mañana del viernes en salón Río, impartió ponencia, dirigida a mujeres; adolescentes; jefes de familia y estudiantes en general, organizada por el Instituto de la Mujer de Río Bravo.
Guzmán Acuña, reveló que cuando se acude a denunciar violencia de género por parte de la mujer ante las autoridades, sólo se toman en cuenta las lesiones, agresiones físicas y se desechan los otros tipos de violencia, por lo que la ponente recordó que existen las siguientes clases de violencia:
-Violencia física, que se traduce en golpes, pellizcos, estrujamientos, lesiones cortantes o punzantes entre otras
-Violencia patrimonial, cuando se desaloja a la mujer de la vivienda de la familia
-Violencia económica, cuando ella es dependiente monetariamente de su pareja y esta la condiciona, amenaza o chantajea económicamente
-Violencia sexual, que implica relaciones íntimas sin consentimiento de la mujer
-Violencia psicológica, que implica amenazas, insultos, vejaciones verbales o bien ignorar los sentimientos o necesidades de la mujer.
La conferencista llamó a identificar los tipos de violencia, a denunciar y apoyar a las mujeres que la sufren a la vez que llamó a que se sumen las voces para se tomen en cuenta el resto de violencias a la hora de integrar expedientes por denuncias o procedimientos familiares.
IGNORAN
Violencia física, que se traduce en golpes, pellizcos, estrujamientos, lesiones cortantes o punzantes entre otras.
Violencia patrimonial, cuando se desaloja a la mujer de la vivienda de la familia.
Violencia económica, cuando ella es dependiente monetariamente de su pareja y esta la condiciona, amenaza o chantajea económicamente.
Violencia sexual, que implica relaciones íntimas sin consentimiento de la mujer.
Violencia psicológica, que implica amenazas, insultos, vejaciones verbales o bien ignorar los sentimientos o necesidades de la mujer.
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