Arrollado hasta morir

A un costado de la camioneta que arrolló a las víctimas, quedaron la pala, el machete y el rastrillo que tres de ellos utilizaban.

Jesús y Luz María son vecinos de la colonia Tolotzin 1 y también les ayudaba otro hombre, a quien reconocieron como trabajador del Ayuntamiento.

Ayer, al filo del mediodía, limpiaban la basura que se acumula y la maleza que crece en la orilla de avenida Gran Canal, una terracería contigua a un afluente de aguas residuales.

Los tres resultaron heridos y fueron hospitalizados a tiempo.

Apenas a unos metros de distancia, un peatón recorría el camino y también fue embestido por el vehículo, pero él no sobrevivió.

Las autoridades indagan si el conductor de la pick up conducía en estado de ebriedad, pues los policías municipales que atendieron el accidente notaron que tenía aliento alcohólico. 

Según las primeras hipótesis, ese factor influyó para que perdiera el control y trazará una diagonal hasta llegar al sitio donde los colonos realizaban la faena y el peatón avanzaba.

A su paso, la camioneta también derribó un árbol y ese impacto impidió que volcara en una ladera aledaña.

Apenas se enteraron, algunos vecinos corrieron al sitio y vigilaron al chofer hasta que los agentes lo trasladaron al Ministerio Público.

También acudieron paramédicos de Protección Civil, quienes ingresaron a distintos hospitales a Jesús, a Luz María y al empleado del Ayuntamiento.

Por el peatón no pudieron hacer nada y sólo lo cubrieron con una sábana blanca.

Antes de eso, la mayoría de lugareños observó su cadáver y estimó que tenía unos 40 años, pero nadie lo reconoció.